lunes, 26 de agosto de 2024

Psiquiatría en la #URSS🟥 🧵

 

“Cuando se transforman las relaciones de producción y se pasa del capitalismo al socialismo, muchos aspectos de las enfermedades mentales y muchas actitudes de la psiquiatría adquieren nuevos aspectos". Así comienza el capítulo “Psiquiatría y Socialismo” del libro “Psiquiatría y Poder” escrito en 1969 por Giovanni Berlinguer. El autor subraya y pone de manifiesto 3 puntos referentes a como operaba la psiquiatría en la URSS.

1.- La psiquiatría se considera en esencia como una rama de la medicina. Esto se menciona en contraste a cómo opera la psiquiatría en el contexto capitalista, no se consideraba pertinente a la psiquiatría la participación en temas como el análisis de conflictos geopolíticos,pero siquiera tampoco sobre la felicidad o la desdicha personal, así como manifestaciones menores de malestar que no constituyen alteraciones clínicas importantes.

En este aspecto se pone de manifiesto que no se atribuye a los psiquiatras funciones de control social.


2.- La cantidad de internados en hospitales psiquiátricos es muy baja. En comparación a países con similares niveles de desarrollo industrial, la tasa de internados en la URSS oscilaba entre una tercera parte y una quinta parte. La rotación es más veloz, frente a los 4 meses máximos de la URSS, destacan los 3 años de media en EEUU. También existía una menor segregación de los enfermos y se implementaron terapias comunitarias. Por tanto, la cronicidad es mucho menor.

En ese sentido, se pone de manifiesto el tercer y último punto.


3.- La sociedad menos competitiva deja más lugar para quienes padecen de alguna disminución. Es importante tener en cuenta que esto se daba de una manera ni mucho menos idílica. En un inicio, el socialismo se guía por la máxima “a cada quien según su trabajo”, solamente en la transición al comunismo se puede progresivamente transformar en “a cada quién según su necesidad”. Por lo tanto, el trabajo sigue teniendo un papel fundamental en el desarrollo personal de los individuos y en su participación en sociedad. Como señala Marx en la “Crítica al programa de Gotha", la nueva sociedad ostenta todavía las “manchas” del capitalismo, por lo tanto el socialismo no puede (y la URSS no pudo) desembarazarse de todo aquello que resulta consecuente del modo de producción capitalista.

lunes, 12 de agosto de 2024

Extracto del texto “Los niños sombra” del libro La Ruta del Samurai. (Jorge Orpianesi)


"En Nagasaki vivía una sombra que había perdido a su dueño. No entendía que había pasado. Hacía unos minutos, ambos habían estado jugando en el patio junto a los demás niños y sus sombras. Las risas llenaban los días de aquella sombra pero una mañana esas risas se apagaron. Nunca supo que había sucedido. La escuela ya no estaba en su lugar, el silencio había reemplazado al bullicio y al mirar a su alrededor solo pudo ver alguna que otra sombra desorientada buscando a su niño. Desahuciada, la sombra se sentó en un escalón junto a la pared y allí se quedó. Si pasas por ese lugar, seguro la podrás ver en silencio, esperando por su pequeño dueño…"

Texto que hace referencia a la escuela Shiroyama de Nagasaki que recibió de lleno la explosión atómica haciendo desaparecer en segundos a 400 alumnos. La imagen muestra la escultura que está en la entrada de la actual escuela Shiroyama y que recuerda a las inocentes víctimas de aquel 9 de agosto de 1945.


Fotografía by Jorge Orpianesi


Video de la escuela en nuestro canal de YouTube: Visitamos Hiroshima y Nagasaki.

domingo, 11 de agosto de 2024

Declaración de la Brigada Internacional del Comité Local de Moscú, del Partido Comunista de la Federación de #Rusia🇷🇺.

Rusia Federal, ciudad de Moscú, 

7 de agosto del 2024.

Hemos tenido conocimiento del arbitrario encarcelamiento del Alcalde de la Comuna de Recoleta, en la República de Chile, del camarada Daniel Jadue, miembro del Partido Comunista de Chile.

Desde Moscú, queremos expresar nuestra Solidaridad con el compañero Daniel Jadue, y expresarle nuestro total apoyo en su lucha contra la oligarquía chilena.

Conocemos las falsas acusaciones que no son más que una acusación política, ante sus programas populares como las Farmacias Populares, Ópticas para el pueblo, Universidad abierta para la juventud de escasos recursos, otros programas que han solucionado los problemas básicos de la población de la Comuna de Recoleta, lo que es un ejemplo y orgullo para Chile.

Exigimos, 

¡LIBERTAD PARA EL CAMARADA DANIEL JADUE!

Estaremos atentos a todas las noticias que nos lleguen de Chile, con respecto a nuestro compañero de lucha, en especial.

Coordinadores de la BRIGADA INTERNACIONAL ( INTERBRIGADA), del Comité Local de Moscú del Partido Comunista de la Federación de Rusia.

Tatiana Deciatova

Serguéi Tímojov

Aquiles Rivas (traductor).

viernes, 9 de agosto de 2024

Faetón y el carro del sol (Mitología Griega)

 


En la antigua Grecia nació un joven llamado Faetón que era el hijo ilegítimo de Helio y Climene. Helio era conocido también como Apolo, dios de la luz y la verdad o el dios del sol. Faetón alardeaba con sus amigos de que su padre era el dios sol. Estos se resistían a creerlo pero Faetón tampoco conocía a su padre y llegó a dudar. Faetón le pide a su madre que le diga la verdad, y ésta le envía al mismo Sol para que sea el quien se la confirme.

Faetón visita a Helio en su palacio construido en la cima de las cumbres terrestres. El Sol no sólo le aseguró que era hijo suyo y de la ninfa Climene, sino que quiso probárselo concediéndole cualquier deseo. Faetón le dijo a su padre que su deseo era hacer lo mismo que hacía él todos los días, conducir su carro de fuego en el viaje del Astro por el firmamento. Helio se arrepintió inmediatamente de su promesa y le advirtió que ni Zeus que domina el rayo de los hombres y gobierna a los dioses lo podía controlar. Faetón insistió diciéndole que si era realmente su hijo podía hacer lo mismo que hacía el. Finalmente Helio, atrapado y apesadumbrado por la promesa que ha pronunciado, debe ceder al peligroso deseo de su hijo, un débil mortal.

Helios no cesaba de hacerle recomendaciones. Debía mantenerse siempre en el medio, ni muy alto ni muy bajo y seguir el mismo rumbo que él recorría en forma cotidiana. Le advirtió que condujera sin apuros, que los caballos se deslizarían solos y que su alineación debía ser perfecta. Faetón subió al carro de oro del sol tirado por caballos en llamas. Y las diosas de las Horas le acomodaron los arneses de oro. Faetón partió y los alados corceles lo llevaron hacia lo alto perdiéndose en los cielos e iniciando el camino del nuevo día.

Pero el carro se movía demasiado y los caballos se asustaron. Faetón no logró dominarlos y perdió el control. Primero se fue demasiado alto, haciendo que la tierra se enfriara y chocando con cuerpos celestes lo que provocó un verdadero caos cósmico. Luego bajó demasiado y chocó con la tierra. La vegetación se secó convirtiendo en desierto la mayor parte de África y quemando la piel de los etíopes hasta volverla negra. Los estragos y sufrimiento que causó en el mundo hicieron que Zeus interviniera para detener el caos, lanzando un rayo fulminante sobre el, quien finalmente cayó mortalmente herido al río Erídano.

Su amigo Cicno se apenó tanto que los dioses lo convirtieron en cisne. Sus hermanas, las helíades, también se apenaron y fueron transformadas en alisos o álamos, según Ovidio, convirtiéndose sus lágrimas en ámbar.

jueves, 8 de agosto de 2024

Revolución (Slawomir Mrozek, República Popular de #Polonia🇵🇱)

En mi habitación la cama estaba aquí, el armario allá y en medio la mesa.

Hasta que esto me aburrió. Puse entonces la cama allá y el armario aquí.

Durante un tiempo me sentí animado por la novedad. Pero el aburrimiento acabó por volver.

Llegué a la conclusión de que el origen del aburrimiento era la mesa, o mejor dicho, su situación central e inmutable.

Trasladé la mesa allá y la cama en medio. El resultado fue inconformista.

La novedad volvió a animarme, y mientras duró me conformé con la incomodidad inconformista que había causado. Pues sucedió que no podía dormir con la cara vuelta a la pared, lo que siempre había sido mi posición preferida.

Pero al cabo de cierto tiempo la novedad dejó de ser tal y no quedo más que la incomodidad. Así que puse la cama aquí y el armario en medio.

Esta vez el cambio fue radical. Ya que un armario en medio de una habitación es más que inconformista. Es vanguardista.

Pero al cabo de cierto tiempo… Ah, si no fuera por ese «cierto tiempo». Para ser breve, el armario en medio también dejó de parecerme algo nuevo y extraordinario.

Era necesario llevar a cabo una ruptura, tomar una decisión terminante. Si dentro de unos límites determinados no es posible ningún cambio verdadero, entonces hay que traspasar dichos límites. Cuando el inconformismo no es suficiente, cuando la vanguardia es ineficaz, hay que hacer una revolución.

Decidí dormir en el armario. Cualquiera que haya intentado dormir en un armario, de pie, sabrá que semejante incomodidad no permite dormir en absoluto, por no hablar de la hinchazón de pies y de los dolores de columna.

Sí, esa era la decisión correcta. Un éxito, una victoria total. Ya que esta vez «cierto tiempo» también se mostró impotente. Al cabo de cierto tiempo, pues, no solo no llegué a acostumbrarme al cambio -es decir, el cambio seguía siendo un cambio-, sino que, al contrario, cada vez era más consciente de ese cambio, pues el dolor aumentaba a medida que pasaba el tiempo.

De modo que todo habría ido perfectamente a no ser por mi capacidad de resistencia física, que resultó tener sus límites. Una noche no aguanté más. Salí del armario y me metí en la cama.

Dormí tres días y tres noches de un tirón. Después puse el armario junto a la pared y la mesa en medio, porque el armario en medio me molestaba.

Ahora la cama está de nuevo aquí, el armario allá y la mesa en medio. Y cuando me consume el aburrimiento, recuerdo los tiempos en que fui revolucionario.